Recomendaciones para hablar con menores cuando necesitan ayuda
Hace un tiempo la APA (American Psychological Association) publicó una hoja de hechos o pequeña guía para hablar con los menores cuando tienen problemas.
Son apenas unos puntos en los que tampoco profundizan demasiado pero me ha parecido interesante traducir el documento y ponerlo aquí.
Hablar con menores cuando necesitan ayuda
Como padre o profesor, eres la primera línea de apoyo para niños y adolescentes. Es importante tener abierta una línea de comunicación con ellos y construir un sentimiento de confianza. Cuándo tus niños y adolescentes tienen dificultades, quieres que se sientan cómodos recurriendo a ti para buscar ayuda.
Es muy importante la habilidad de identificar cuándo los menores están luchando emocionalmente. Los niños y adolescentes tienden a interiorizar sus sentimientos. Si algo les preocupa, no suelen manifestarlo y pedir apoyo. A veces no son conscientes de tener esa ayuda disponible. Así pues, es esencial para padres y profesores ser capaces de detectar cuándo va mal algo y cómo acercarse a niños y adolescentes.
Puedes percibir como un reto conseguir que tus hijos se abran y hablen contigo. Los siguientes consejos pueden ser útiles para empezar una conversación y entender qué está ocurriendo en sus vidas.
Hazle sentirse seguro. Quieres facilitar que los menores se sientan cómodos hablando contigo. Es esencial dejar claro por qué estás hablando con ellos. Los niños especialmente temen tener problemas o ser castigados si se ven forzados a hablar en privado. Tranquilízalos, ese no es el caso; estás ahí ofreciendo apoyo. Los padres podrían considerar reservar un poco de tiempo para hablar cara a cara regularmente, como almorzar con tu hijo semanalmente o cada dos semanas.
Escúchalos. Tomate el tiempo de escuchar activamente por qué tu hijo tiene un bajón de rendimiento escolar o habla de la muerte o lo que un adolescente tiene que decir. Muchas veces, todo lo que quieren los niños o adolescentes es alguien que les escuche. Intenta entender su punto de vista antes de hacer sugerencias. A veces tu propia ansiedad te puede empujar a intentar arreglarlo todo. Pero en muchos casos, la mejor ayuda que puedes ofrecer es escuchar atentamente.
Acepta y apoya su necesidad de ayuda. Si un niño o adolescente te dice que está sintiendose triste o molesto, por ejemplo, diles que estás orgulloso de que comparta sus sentimientos. Hazles saber que aprecias el esfuerzo que representa para ellos hablar contigo y confiar en ti para buscar ayuda. Si tu hijo parece necesitar más ayuda de la que tú puedes proporcionar, consulta con un profesional adecuado. Puedes comenzar por hablar con el psicólogo del colegio.
Sé auténtico. Intenta no hablar desde un guion. Los adolescentes saben cuándo no estás siendo genuino. Si eres abierto, auténtico y relajado, les ayudará a comportarse de la misma manera.
No tengas miedo de decir «no lo sé». Como padre o profesor, está bien admitir que no tienes todas las respuestas. Aun así, si un niño o adolescente te pregunta algo, tendrías que hacer el esfuerzo de encontrar una respuesta o alguien que pueda ayudar.
La Asociación Psicológica Americana agradece a Laurie D. McCubbin, PhD; Stephanie S. Smith, PsyD; Lynn Schiller, PhD; Andrew J. Adler, EdD; y Diane C. Marti, PhD, por contribuir a esta hoja de hechos.
Cuidado con las señales de suicidio
El suicidio es evitable. Los dos pasos más importantes para impedir el suicidio es reconocer las señales de aviso y conseguir ayuda. Las señales de advertencia pueden incluir un importante uso de drogas o alcohol, haciéndose daño a ellos mismos. Si crees vuestro niño o estudiante está en peligro, llama al 112 inmediatamente y permanece con él mientras la ayuda viene en camino.
Conclusión
No soy traductor profesional, pero he hecho lo que he podido con ello. He intentado ser lo más fiel al original posible, pero algunas frases y expresiones las he traducido más libremente porque en español sonaban muy raros.